PALOMINO ASUMIÓ LA PRESIDENCIA DEL RADICALISMO LOCAL CON FUERTE RESPALDO DIRIGENCIAL

María Emilia Palomino asumió formalmente el jueves la presidencia del Comité Radical de Bolívar, en un evento que se celebró en el recinto de la Avenida San Martín. La ceremonia estuvo acompañada por el Dr. Miguel Fernández, presidente de la UCR bonaerense, quien destacó la importancia de la renovación de autoridades dentro del partido como un mecanismo vital para la vigencia y crecimiento del radicalismo.
Antes del acto, se realizó una conferencia de prensa, a la que asistió QUÉ PASA EN BOLÍVAR, que contó también con la presencia de Sergio Croce, presidente saliente de la UCR local, Ludmila Amengual, flamante titular de la juventud radical bolivarense y Manuel Mapis, quien deja su cargo en manos de Amengual.
En el encuentro con la prensa, Fernández reflexionó sobre el valor que tiene permitir la rotación de las autoridades, ya que esto no solo da lugar a nuevas miradas, sino también a la formación de nuevos dirigentes, especialmente en un contexto político cada vez más competitivo.
También destacó que uno de los objetivos fundamentales de esta renovación es preparar a los nuevos líderes para los desafíos electorales venideros, particularmente las elecciones de medio término que se celebrarán este año, donde se elegirán concejales, consejeros escolares y legisladores. Asimismo, hizo hincapié en la importancia de mantener una constante evaluación de las necesidades locales, una perspectiva que, según su visión, solo puede materializarse si los partidos políticos del interior continúan siendo protagonistas de las discusiones y decisiones políticas a nivel provincial y nacional.
Otro de los puntos que abordó el Dr. Fernández fue el desdoblamiento de las elecciones, una medida que ha ganado relevancia en los últimos tiempos. Según su visión, este desdoblamiento permitiría que la provincia de Buenos Aires discuta sus problemas de manera independiente de los temas nacionales. Esto, aseguró, facilitaría una discusión más centrada en cuestiones específicas de la provincia, como la seguridad, la salud pública y la educación, sin estar constantemente influenciada por las dinámicas de la macroeconomía nacional.
Al respecto, Fernández hizo referencia a la asimetría en la coparticipación, y a la distribución de recursos entre la el interior de la provincia y el conurbano, lo que a su juicio ha generado disparidades notorias en el acceso a obras y servicios básicos en muchas de las regiones más necesitadas de la Provincia.

En cuanto a las alianzas políticas y la situación de la UCR a nivel nacional, Fernández señaló que el escenario actual de polarización está llevando a muchos a replantearse la construcción de alternativas políticas más amplias. Reconoció que, a pesar de las dificultades, es crucial que el radicalismo trabaje junto a otras fuerzas políticas que compartan valores fundamentales, como la eficiencia en la gestión y el respeto por el equilibrio fiscal.
Advirtió que las alianzas con sectores como La Libertad Avanza podrían ser complicadas, sobre todo porque al mileismo parecería no interesarle realizar coaliciones y reconoció que un sector del radicalismo no ve con malos ojos la posibilidad de un frente amplio con el justicialismo provincial, representado en la figura del gobernador Kicillof. No obstante, hizo hincapié en la importancia de construir una alternativa desde las convicciones y no desde la conveniencia.
Por su parte, Palomino expresó su visión sobre los desafíos que enfrenta el radicalismo en Bolívar. Afirmó que el cambio de autoridades es solo una formalidad, pero que el verdadero reto radica en fortalecer el partido y sus bases, tanto entre militantes como simpatizantes. Subrayó la importancia de que todos los radicales trabajen unidos para brindar soluciones a las necesidades locales, destacando que la UCR debe mantenerse firme en la defensa de sus principios, sobre todo en momentos de adversidad.
En cuanto a la salida de algunos referentes del radicalismo hacia La Libertad Avanza, Palomino adoptó una postura positiva, interpretando esta situación como una oportunidad para fortalecer al partido. Consideró que este tipo de movimientos no debilitan al radicalismo, sino que clarifican el camino y fortalecen la convicción de aquellos que siguen comprometidos con los principios del partido.
La nueva presidenta del comité radical también hizo un llamado a la unidad, especialmente en el contexto de las elecciones legislativas que se avecinan, donde se renovarán varias bancas en el concejo deliberante. Afirmó que estas elecciones son cruciales no solo para el control del ejecutivo, sino para garantizar una mayor fiscalización y control del poder, algo que, según su perspectiva, es esencial para el bienestar de la comunidad.
En este sentido, Palomino destacó que la falta de mayoría en el Concejo Deliberante ha limitado la capacidad de control sobre el ejecutivo, lo que ha sido evidente en la falta de tratamiento de proyectos importantes, como el que proponía la suspensión de la tasa vial a los productores afectados por las inundaciones. Aseguró que, con una mayor representación opositora, el partido podría ejercer un rol más activo en la fiscalización y en la presentación de iniciativas para mejorar la calidad de vida de los ciudadanos.
Por último, tanto Fernández como Palomino coincidieron en la necesidad de que el radicalismo se presente como una alternativa sólida frente a la actual coyuntura política, marcada por la incertidumbre y la polarización. Ambos enfatizaron la importancia de defender la democracia, las instituciones y los principios fundamentales del radicalismo, como el equilibrio de poderes y la autonomía de los municipios, en un contexto donde muchas veces las decisiones políticas se ven condicionadas por intereses externos al territorio.