“IMBÉCIL, IDIOTA, RETARDADO Y DÉBIL MENTAL”: LOS TÉRMINOS UTILIZADOS EN UNA RESOLUCIÓN DEL GOBIERNO SOBRE DISCAPACIDAD

La reciente Resolución 187/2025 emitida por la Agencia Nacional de Discapacidad (ANDIS) ha desatado una fuerte polémica a nivel nacional, debido al uso de términos arcaicos y ofensivos como “imbécil, idiota, retardado y débil mental”. Estas expresiones fueron incluidas en un baremo destinado a evaluar la capacidad de las personas con discapacidad intelectual para acceder a pensiones por invalidez, lo que ha generado una ola de indignación entre familias, organizaciones y especialistas en discapacidad.

En el anexo publicado en el Boletín Oficial, la terminología utilizada para clasificar a las personas con discapacidad intelectual evoca prácticas del siglo pasado, con descripciones despectivas que se dejaron de utilizar hace más de 50 años. Además, se retoma el concepto de “retardo mental”, una expresión obsoleta que ya había sido reemplazada por la de “discapacidad intelectual”, siguiendo las recomendaciones del Manual de Psiquiatría Norteamericano (DM5) y otros organismos internacionales. Estas palabras no solo revictimizan, sino que perpetúan un enfoque discriminatorio y estigmatizante.

Eduardo Maidana, miembro del Foro Permanente de Promoción y Defensa de los Derechos de las Personas con Discapacidad, criticó duramente el texto: “Es una barbaridad. Esta terminología pertenece a principios del siglo XX, antes de que existieran mediciones más precisas como el coeficiente intelectual (CI)”. Para Maidana, esta resolución es solo otro reflejo de los atropellos que sufren las personas con discapacidad bajo este Gobierno, señalando que es inaceptable que una entidad como la ANDIS, encargada de velar por los derechos de estas personas, permita un retroceso tan marcado.

Organizaciones y defensores de los derechos de las personas con discapacidad han solicitado una retractación inmediata del Gobierno, al considerar que no solo se trata de un uso inadecuado del lenguaje, sino que también revela una visión obsoleta sobre la discapacidad. “El Gobierno de Milei ha decretado que la gente con discapacidad sea clasificada como ‘idiota’, ‘imbécil’ y ‘débil mental’, violando acuerdos internacionales contra la discriminación”, expresó en redes sociales el abogado Julián Bollain.

El impacto de esta resolución, más allá del lenguaje, pone en evidencia la necesidad de avanzar hacia una legislación que trate la discapacidad con dignidad, respeto y sin prejuicios. Las comunidades afectadas exigen una revisión inmediata de los términos y un abordaje adecuado que respete los derechos humanos y las recomendaciones internacionales en esta materia.