INTEGRANTES DEL CLUB DE PESCA RESPONDIERON CON DUREZA A LAS CRÍTICAS A LA COMPUERTA EN LA ASAMBLEA DE LA RURAL

La tensión en torno a la obra de la compuerta de la Laguna San Luis sumó un nuevo capítulo el viernes pasado, cuando durante la asamblea de productores agropecuarios en la Sociedad Rural de Bolívar se escucharon críticas a la intervención hidráulica. Las respuestas llegaron casi de inmediato: en las redes sociales de Qué Pasa en Bolívar, miembros del Club de Pesca “Las Acollaradas” se expresaron en duros términos contra quienes cuestionaron la obra, apuntando directamente a un productor.

Mauricio Iglesias, presidente del Club de Pesca, fue tajante en su acusación contra Norberto López, uno de los asistentes a la asamblea. “Por gente obtusa e inescrupulosa como el Sr. (si cabe la deferencia) Norberto López, es que nunca se van a poder sanear los problemas estructurales del agua”, escribió Iglesias, y denunció la existencia de un canal clandestino en el campo de López que desagua en la laguna e inunda la costa sur del predio. “60 hectáreas ganaderas que el club alquila para poder pagar sueldos están todas inundadas. Hace 40 días que no cobramos. Próximamente acudiremos a la justicia para hacer la denuncia pertinente”, adelantó.

Otro referente del Club, Héctor Luis Andrés “Cachi” Ahumada, también se expresó con dureza. “La verdad que semejante nivel de ignorancia de ese sujeto es increíble. Este tipo de personajes son los que restan todo el tiempo y hacen caer los reclamos justos de obras que debe terminar Nación y que están paradas por caprichos de nene rebelde”, escribió.

La compuerta, cuya obra ha sido objeto de debate desde sus inicios, es señalada por algunos productores como una de las posibles causas de anegamientos en zonas rurales cercanas. Sin embargo, desde el Club de Pesca rechazan esta idea de plano. “Creer que la zona se inunda por la compuerta cuando esta o estuvo casi media provincia inundada habla de una brutalidad increíble”, agregó Ahumada.

Durante la asamblea, los productores plantearon su preocupación por el manejo del agua y pidieron mayor información y transparencia sobre los efectos de las obras. La compuerta, que forma parte de un plan mayor de infraestructura hidráulica, ha quedado en el centro de una discusión que cruza intereses productivos, comunitarios y políticos.